Acorde a su enseñanza, la fuente de la desdicha del ser humano reside en el desconocimiento de su propia naturaleza. Los individuos identifican su “yo” con lo percibido por sus sentidos a todos los niveles. La identificación se produce tanto a nivel físico, con el cuerpo, como a nivel mental, con los pensamientos, y a nivel emocional, con los sentimientos. En cambio, según Osho, la naturaleza verdadera del individuo reside en su conciencia, o la capacidad de atestiguar lo percibido por los sentidos.
La conciencia, o la capacidad de atestiguar, emerge como consecuencia de la practica de la meditación. La meditación, que puede practicarse por medio de técnicas de lo más variadas, permite al individuo trascender la identificación con el ego, desechando las proyecciones de identidades falsas creadas por la mente.
A lo largo de varias décadas, Osho pronunció numerosos discursos, contestando a las preguntas de sus numerosos discípulos. Estos discursos fueron recogidos en numerosas cintas de audio y video. Se publicaron cientos de libros en decenas de idiomas.
La conciencia, o la capacidad de atestiguar, emerge como consecuencia de la practica de la meditación. La meditación, que puede practicarse por medio de técnicas de lo más variadas, permite al individuo trascender la identificación con el ego, desechando las proyecciones de identidades falsas creadas por la mente.
A lo largo de varias décadas, Osho pronunció numerosos discursos, contestando a las preguntas de sus numerosos discípulos. Estos discursos fueron recogidos en numerosas cintas de audio y video. Se publicaron cientos de libros en decenas de idiomas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario